Por: Ángel E. Melians
En el monasterio San Lorenzo de El Escorial hay varias reliquias sagradas para Occidente. Pueden verse astillas de la Vera Cruz y la corona de espinas, cabellos de Cristo y la Virgen. Sin embargo, no son las urnas de plata y el oro barroco los verdaderos tesoros. Está en todas partes, en la arquitectura, en la biblioteca. Bajo Felipe II el imperio español fue el primero en tener territorios en varios continentes del mundo. Así pues, ¿qué madera habría de revestir, soportar y embellecer el palacio del centro imperial? Hay una isla en el Caribe que se llama Cuba, que no tiene la corona de espinas, pero tiene la caoba.
La caoba (Swietenia mahagoni) pertenece a la familia meliaceae y es una de las especies maderables más valiosas del mundo. La palabra “caoba” proviene del tupí “tauba”, que significa ‘año’. Se conoce con los nombres comunes de caoba, caoba antillana, caoba de Cuba, caoba de Santo Domingo; en Haití como acajou, y mahogany en Bahamas.
Tiene un área de distribución natural que comprende el sur de la Florida con sus cayos, Bahamas, Cuba, Isla de la Juventud, Jamaica, Haití y República Dominicana. Pero ha sido introducida además en Bermudas, Puerto Rico y las Antillas Menores.
El árbol es de gran tamaño, puede alcanzar unos 20 metros de alto y sobrepasar los 2 metros de diámetro. Sin embargo, desde que nuestras selvas eran vírgenes existen referencias de ejemplares mayores.
El tronco suele ser corto y ramificado si crece aislado, pero cuando precisan más luz por estar rodeados de otros ejemplares, son rectos y de una longitud mayor. En su base se desarrollan contrafuertes, como si de una catedral gótica se tratara, para sostener el árbol. La copa es amplia, frondosa y las ramas gruesas. La corteza puede variar de color pardo claro cuando son jóvenes, a castaño oscuro, dividida en placas y escamosa cuando son viejos. Las hojas, de un verde brillante oscuro, son bastante suaves al tacto.
Las semillas de este árbol son aladas y de fácil dispersión por el viento, y sus flores, al decir del destacado naturalista cubano Juan Tomás Roig, son “como un racimo de perlas”
Seguramente la reconocerás si has estado en el barrio Pastorita, a la entrada de la ciudad de Cienfuegos, donde se yergue un hermoso ejemplar, justo frente a la policlínica, escoltado por unos pinos.
Usos
Es probablemente la madera más conocida y apreciada para la ebanistería en el mundo. Su belleza y resistencia hace que se emplee en objetos torneados, la decoración de interiores, los pisos y marcos. Por eso no es de extrañar que haya sido ampliamente usada en El Escorial.
La corteza se emplea en cocimientos contra el catarro y en baños para las enfermedades de la piel. Además, se le atribuyen propiedades febrífugas y purgantes.
La madera de Swietenia mahagoni, así como las otras dos especies de Swietenia, se utiliza para fabricar instrumentos musicales modernos, debido a sus cualidades superiores de madera tonal.
El primer uso importante de la caoba en España e Inglaterra fue en la construcción de barcos durante el siglo XVIII. Varias de las más grandes embarcaciones españolas se hicieron con madera de las Indias Occidentales. Asimismo se convirtió en el material esencial que condujo a la edad de oro de la fabricación de muebles británicos durante ese siglo. Ha sido utilizada para estos fines desde entonces más o menos continuamente en toda Europa y Estados Unidos.
Riesgos
Dada su intensa explotación comercial, existe la preocupación de varias renombradas organizaciones ambientalistas por la reducción de los bosques donde habita, fenómeno del que Cuba no escapa.
Debemos señalar además la importancia de plantar la caoba dentro del establecimiento de bosques mixtos, compuestos por familias botánicas diferentes a la Meliaceae, dada su susceptibilidad al ataque del “talador de las meliáceas”, insecto que entorpece el crecimiento de ejemplares saludables y valiosos desde el punto de vista maderero.
La famosa caoba de Bouyon
La caoba cubana más grande de que se tenga noticias existió en las proximidades de Cartagena, en el municipio de Rodas, y fue cortada en 1808. Las dimensiones extraordinarias del diámetro de la troza del tronco del árbol, cuya longitud era de 6 metros fueron: 3, 65m en un extremo y 3 metros en el otro, para un volumen de 24,9 metros cúbicos, equivalente al volumen de 21 trozas de árboles con medio metro de diámetro. Es posible que genes de esta formidable caoba estén presentes en muchos de los ejemplares que crecen en Cienfuegos. Y que haya existido en esta ciudad, quizás obedezca más al triste hecho de que los bosques del territorio estuvieron ocupados por, tal vez, las últimas reservas de bosques selváticos en las llanuras de Cuba. Por esta razón ya en otros puntos de la geografía insular no era común encontrar ejemplares de tamañas dimensiones, dada la presión a que estaban sometidos los bosques con la expansión de la agricultura y el aumento poblacional.
Topónimos
La presencia de este árbol ha de provocar el respeto ancestral que percibieron nuestros primeros habitantes y no el deseo voraz de su tala. Su porte inspira, como en los grandes templos de la humanidad, la cercanía con lo superior en el hombre. Nuestra isla tiene en la caoba uno de sus más hermosos pilares. Por eso no es extraño que encontremos su nombre relacionado a poblados en todo el país.
Tenemos, por ejemplo, los pueblos La Caoba en La Isla de la Juventud, Camagüey, Bayamo y Santiago de Cuba. Además, el Cayo Caoba, en la costa sur de la provincia de Ciego de Ávila; el río La Caoba en Santiago de Cuba; Loma La Caoba, en Candelaria, Pinar del Río e incluso es el nombre de una de las calles de la Base Naval de Guantánamo.
Curiosidades
La caoba tiene una larga vida, ya que puede alcanzar cientos de años.
La caoba es el Árbol Nacional de República Dominicana.
La caoba es usada particularmente para estuches de objetos científicos y delicados.
La madera también se utiliza en la fabricación de guitarras eléctricas como los modelos Gibson Les Paul.
Una famosa caoba de Cuba que se alzaba en Pico Chico, provincia de Pinar del Río, tenía más de 20 m de alto, 6,6 m de circunferencia y le atribuyen cientos de años de existencia.
Existe una variedad de caoba cuyo patrón en la madera es distintivo y ha sido reportada como procedente de Cienfuegos: la caoba de clavo, cuya madera preciosa está salpicada de puntos negros, como si estuviera claveteada.
Referencias
Betancourt Barroso: Silvicultura especial de árboles maderables tropicales, Editorial Científico Técnica, La Habana, 1987.
EcuRed: https://www.ecured.cu/Caoba
Delhy Albert Puentes, Lázaro Rodríguez Farrat &Victor Vigil Escalera: “Consideraciones sobre el género Swietenia Jacq. (Swietenioideae, Meliaceae) en Cuba”:
https://revistas.ucm.es/index.php/BOCM/article/download/BOCM0202110063A/6364/
“La Caoba más grande de Cuba”: https://www.google.ca/search?q=la+caoba+mas+grande+de+Cuba&ie=UTF-8&oe=UTF-8&hl=es-ca&client=safari
Nota: Este trabajo es una producción original de Cienfuegos Verde.
Escritor y licenciado en Historia. Universidad de Cienfuegos «Carlos Rafael Rodríguez»
Gracias Ángel por esta contribución a Cienfuegos Verde. La caoba cubana es en efecto un tesoro natural que quizás no hemos cuidado como tal. Tu trabajo será nuestra referencia para el propósito en que nos hemos empeñado a desarrollar en Cienfuegos Verde: el incremento de los árboles y bosque nativos en la provincia.
Esperaremos tus próximas entregas para continuar enriqueciendo el conocimiento sobre los árboles cubanos y con ello azuzar el interés de los lectores por plantarlos y/o cuidarlos.